Lo primero que nos ha llamado la atención de sus pinturas es la ineludible fascinación del propio autor por a la arquitectura, representada a través de minimalistas y futuristas espacios, llegando a rozar una frontera mágica con la pintura abstracta, algo así como un abstracionismo mágico aplicado a la realidad. Pero sin duda sus obras son algo más que pura arquitectura. Como todo buen artista, su obra habla por si misma y nos cuenta de otras referencias que inspiran el trabajo de este madrileño: La ciencia ficción y el constructivismo ruso. Argüello ha sabido captar en un lienzo, el mismo ambiente que Andrei Tarkovsky capturo en sus películas y dotarlo de una aire fresco parecido en algún caso a lo que el holandes Boris Tellegen (aka Delta) muestra en su evolución creativa. Obras como Memento Amo, Ice Cake o la increíble Stereogarden así lo atestiguan.